Cuando está cerca un nuevo aniversario de
Independencia en Ecuador, y que dio lugar a una serie de emancipaciones en
América, es prudente recordar a uno de los precursores de esta gesta, Eugenio
de Santa Cruz y Espejo.
El 10 de Agosto de 1809, es una fecha de gran
importancia para los ecuatorianos y para toda América, pues comienza un proceso
independentista que logra despojarse del yugo español, impuesto desde la
denominada "conquista de América" con Cristóbal Colón en 1492 y
posteriormente una serie de incidencias por parte de los españoles que lograron
apoderarse de los territorios de centro de Sudamérica.
En territorio de lo que hoy es Ecuador, luego del
fracaso Inca, debido a su desmedida ambición, surge la figura de Atahualpa para
derrotar estos ímpetus, sin embargo en momentos difíciles para el nuevo
soberano del Tahuantinsuyo, irrumpen los de "ultramar" y comienza el
coloniaje que fenece en su primera parte el 10 de agosto de 1809 y luego el
triunfo definitivo el 24 de mayo de 1822."
En el primer proceso, es indiscutible la figura
de Eugenio Espejo, hombre estudioso, amante de la lectura, conocedor de
diferentes temas de coyuntura política y social, quien enciende la chispa para
que más tarde se concrete la emancipación en nuestro país.
En honor a este destacado personaje, la Unidad
Educativa Municipal Experimental que lleva su nombre, en Quito, no ha
escatimado esfuerzos, por realizar un mediometraje sobre la vida y obra de este
insigne hombre de la Patria, cuya puesta en escena está previsto para la
tercera semana de junio de este año.
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